Viernes

 Los viernes tienen una vibra especial para mi, nací un viernes, el día de Venus. Curiosamente Venus es mi astro regente, el planeta de la belleza, la armonía y el amor. Los viernes tienen esa mezcla rara de final y comienzo, de liberación, disfrute, de sentir que ya nada pesa. Todo es placentero los viernes. A mi me cuesta sentir placer, me cuesta conectar con el disfrute, con la pausa, el descanso, son cosas que estoy integrando. 

Los viernes siempre me conectan con todo lo lindo que tengo en mi vida, todo lo que construí. Pero mi mente tiene un mecanismo extraño que aun no logré descifrar bien: siempre que conecto con algo lindo o que me hace feliz, automáticamente me hace pensar en cuando eso no esté, en la tristeza que me va a dejar, en la falta y las ausencias que me recorren y me acompañan desde que soy chica. Es como si cada vez que algo lindo aparece yo ya estoy pensando en cuando desaparezca, y en el vacío que me va a dejar. Podría decirse que es ansiedad, aunque yo creo que es más la forma en la que mi mente aprendió a funcionar, pura costumbre. 

El mecanismo siempre es el mismo: idealizar algo (o alguien) al punto de creer que ahí reside la felicidad y la completitud de mi vida, sentir éxtasis, alegría y euforia, después con el tiempo la máscara comienza a caer y puedo ver la realidad: que esa situación o persona no era tan especial, o que yo no me permití conectar con su singularidad por ponerle tantas expectativas desde el principio, ahí me decepciono, me enojo y me invade la tristeza y el vacío nuevamente. 

Me invaden también las preguntas: ¿Qué hice mal? ¿Qué hay de malo en mi? ¿Por qué me persiguen las ausencias? 

Uno no es su historia, pero como cuesta a veces separarnos de eso, hacerle entender a nuestra cabeza que lo que pasó no tiene porqué repetirse, sacarse el miedo a volver a sentir tanto dolor y liberarnos de esos patrones que tanto condicionan la libertad. 

Volviendo al viernes, creo que tienen algo especial. Me gusta iniciar cosas los viernes, los lunes tienen un peso horrible de obligación, en cambio lo que inicias los viernes lo haces por disfrute, porque querés, porque sabes que te va a hacer bien. Quizás este viernes sea el inicio de una nueva actitud: empezar a mirar lo que está, en lugar de lo que falta.

Flori.